¿Cómo afecta el proceso de curación al jamón? En Jamones Lazo, nuestra empresa especializada en el jamón ibérico de bellota, te vamos a hablar de la importancia del proceso de curación. En este proceso está la clave de una pieza de calidad.
El proceso de curación del jamón ibérico es muy importante. En este nuevo post de Jamones Lazo podrás conocer en qué consiste y por qué es tan importante para que el sabor de la pieza sea exquisito.
Proceso cuidadoso y delicado
Este es un arduo proceso. No es una tarea sencilla y no se puede dejar nada al azar. Todo está estudiado con mimo para que la pieza de jamón ibérico de bellota cuando salga de esta última fase esté perfecta.
El proceso de curación tiene una serie de objetivos. Entre los que destacan dos principalmente, la mejora de la calidad y la conservación de la pieza. Todos los esfuerzos se concentran en que estos dos aspectos se cumplan a la perfección.
Para medir si está cumpliéndose de forma correcta o no, puedes fijarte en una serie de indicadores naturales de la pieza ibérica. Empezando por la composición de la carne, la textura y terminando por el color y el olor, sin olvidar el sabor.
Tal y como hemos dicho con anterioridad este es uno de los procesos más complejos desde que empieza a tratarse la pata de jamón 100% ibérico de bellota. ¡Te lo aseguramos!
Etapas del proceso
En Jamones Lazo, nuestra empresa especializada en el jamón ibérico de bellota, te vamos a explicar cuáles son las etapas que se dan durante este proceso. Te las enumeramos a continuación:
- Salazón: esta es la primera fase. Consiste en incorporar sal marina en las extremidades del cerdo ibérico de bellota. El tiempo de duración de esta fase dependerá en gran medida del peso de la pieza. Cuantos más kilos pese más tiempo tendrá que estar en esta primera fase.
- Lavado pieza: después se lava la pieza con agua caliente para eliminar la sal externa. Puede realizarse mediante el uso de máquinas o con cepillos y a mano. Es una de las etapas más importantes de todo el proceso.
- Secaderos naturales: tras esto, las piezas pasan a estos secaderos. En este punto las grasas del jamón empiezan a desprender ese aroma tan característico. Las piezas estarán en estos entre 6 y 9 meses. Además, están expuestos a unas temperaturas que pueden rondar entre los 15 y los 30 grados.
- Envejecimiento en bodega: esta es la última fase. Esta sirve para el envejecimiento del jamón. Durante este tiempo el jamón sigue estado muy cuidado y con unas condiciones óptimas para que el sabor, el olor y la textura sea inigualable. El proceso de curación del jamón ibérico de bellota marca la diferencia.
Estas son las fases del proceso de curación de las piezas ibéricas. Es un proceso cuidadoso que permite y asegura que el jamón tenga unas características únicas.
Si quieres probar uno de nuestros exquisitos jamones no dudes en visitarnos. En Jamones Lazo, nuestra empresa especializada en el jamón ibérico de bellota, tenemos los mejores productos del mercado. ¡Te lo aseguramos! ¿Te animas a vivir una experiencia gastronómica única?