En el mundo de los productos ibéricos, el entorno natural desempeña un papel fundamental en la obtención de la máxima calidad. En este sentido, la dehesa, ese ecosistema único y excepcional, se erige como el escenario perfecto para la cría y engorde de los cerdos ibéricos, dando lugar a auténticas delicias gastronómicas como los jamones y embutidos ibéricos de Jamones Lazo.
La montanera es una práctica tradicional en la crianza de cerdos ibéricos en España. Consiste en dejar que los cerdos pasten libremente en la dehesa durante los meses de otoño e invierno, alimentándose principalmente de bellotas de encina y alcornoque que caen de los árboles. Esta alimentación natural y rica en grasas monoinsaturadas contribuye a que la carne de estos cerdos tenga un sabor distintivo y de alta calidad. La montanera es una etapa fundamental en el ciclo de vida del cerdo ibérico y suele tener lugar entre los meses de octubre y febrero.
La Dehesa: un oasis para la cría de cerdos ibéricos
La dehesa, con sus extensos campos de encinas y alcornoques, es el hogar natural de los cerdos ibéricos durante la montanera. En este periodo, estos animales se alimentan libremente de bellotas, hierbas y otros productos naturales que abundan en este entorno privilegiado. Este régimen alimenticio, como bien hemos comentado previamente, no solo les proporciona los nutrientes necesarios para un óptimo desarrollo, sino que también influye de manera determinante en el sabor y la calidad de los productos finales.
La importancia de la montanera en la alimentación del cerdo ibérico
Durante la montanera, los cerdos ibéricos disfrutan de una dieta rica y variada, principalmente compuesta por bellotas, hierbas aromáticas y otros recursos naturales presentes en la dehesa. Este periodo de engorde en libertad contribuye a que la carne de estos animales adquiera características únicas, como un mayor contenido de grasa infiltrada y un sabor inigualable. La selección de jamones y embutidos ibéricos de Jamones Lazo, garantiza este respeto a la crianza de los cerdos que contribuye a la excelencia como resultado en cada uno de sus productos.
El proceso de curación: un arte que potencia la calidad
Una vez finalizada la montanera, los cerdos ibéricos son sacrificados y sus jamones y embutidos pasan por un proceso de curación artesanal que puede extenderse durante años. Este proceso, llevado a cabo por maestros jamoneros con una amplia experiencia, es crucial para potenciar las cualidades organolépticas de la carne y obtener un producto final de máxima calidad. En este sentido, la selección cuidadosa de las piezas, el control de temperatura y humedad, así como los tiempos de maduración, son aspectos clave que garantizan la excelencia de los jamones y embutidos ibéricos de Jamones Lazo.
Sabor y calidad sin igual en cada bocado
El resultado de este minucioso proceso se traduce en un sabor y una calidad sin comparación. Los jamones y embutidos ibéricos de Jamones Lazo destacan por su textura suave y jugosa, su característico color rojo oscuro y su equilibrada combinación de dulce y salado. Cada bocado es un homenaje a los amantes de la buena gastronomía.
Descubre la excelencia en Jamones Lazo
En la tienda online de Jamones Lazo, encontrarás una amplia selección de jamones y embutidos ibéricos elaborados con los mejores productos de la dehesa durante la montanera. Desde exquisitos jamones ibéricos de bellota hasta deliciosos salchichones y chorizos, cada producto refleja el cuidado y la dedicación con los que se elabora. Sumérgete en el mundo de los sabores auténticos y descubre la excelencia en cada bocado con Jamones Lazo.