Seguro que no se te había ocurrido mezclar el jamón ibérico con el cava, pero parece que es la pareja de moda en la actualidad y en Jamones Lazo, especialistas en productos ibéricos de la Sierra de Huelva te enseñamos por qué pueden ser el maridaje perfecto.
Por separado, tanto el jamón ibérico como el champán o cava, se posicionan como dos imprescindibles en el mundo de la gastronomía pero, ¿y juntos? Además de su sabor inconfundible y la calidad de ambos, el jamón ibérico y el cava armonizan perfectamente.
Y esta combinación cada vez está más de moda en España. Y es que, el jamón ibérico casa maravillosamente con este vino espumoso.
¿Por qué triunfa este maridaje?
Uno de los primeros en destacar la unión entre el jamón y el cava fue el popular cortador jamonero Nico Jiménez y es ahora un bar de Madrid llamado «Bocadillo de Jamón y Champán» quien tiene parte de culpa de la propagación de esta «pareja ideal».
La principal característica de la mezcla entre jamón y champán se fundamenta en los matices que crean en el paladar estos dos productos gastronómicos.
Son esenciales los aromas del champán y los sabores a tahona que caracterizan a los vinos espumosos secos y, por otra parte, hemos de sumar el burbujeo único del champán y la acidez del sabor.
Estas características no hacen otra cosa que equilibrar el paladar una vez degustado el jamón, preparándolo para la próxima porción de nuestro producto ibérico preferido, mucho más si cuenta con la calidad de Jamones Lazo.
Es cierto que únicamente las catalogaciones de cava brut y cava brut nature son las que se consideran idóneas, aunque habría que detenerse en los tipos de uva usadas y el tiempo de reposo en la cava para establecer qué jamón es el que combina de forma más acertada.
Sin embargo, todos los jamones ibéricos son magníficos para maridar con cava.
Por regla general, el cava o el champán que marida de forma idónea con los jamones de Denominación de Origen, y, por tanto, potencian su sabor son los que menor cantidad de azúcares añadidos contienen.
Otro consejo es que los jamones que provienen de cerdo ibérico y han sido alimentados con bellotas, son los que mejor combinan con los cavas que poseen un mayor tiempo de crianza en bodega, como pueden ser los Cavas Reservas y Grandes Reservas.
Aunque, es cierto que dentro de cada Denominación de Origen existen cambios. Así, a los jamones ibéricos de bellota de Guijuelo, que suelen ser más suaves, es recomendable maridarlos con un cava o champán de reserva; mientras que nuestro Jamón Ibérico de Huelva, que tiene un sabor más intenso y potente, casa mucho mejor con los cavas que cuentan con una crianza superior, como es el caso de los cavas Gran Reserva.
Desde Jamones Lazo, especialistas en productos ibéricos de la Sierra de Huelva, te animamos a degustar tu jamón ibérico con una copa de cava para que experimentes este sabor intenso que tanta popularidad ha alcanzado. ¿Qué opinas de este nuevo maridaje?